girl v. groupies

La verdad de la milanesa es que girlontape estuvo experimentando emociones novedosas hacia ciertos elementos de su público, quienes lograron despertar en ella una animosidad fuera de toda proporción a su número, por cierto minoritario.

Se la podría comparar a la furia -desmesurada, istintiva, atávica- que le provocan las cucarachas: por un lado son seres viventes que también tienen derecho a circular en este universo que compartimos bla bla bla... pero por otro, desde que pisan mi casa sólo quiero aniquilarlas. Y punto.

Presa de su halucinación kafkaiana -es decir, que algunos lectores se habían convertido en insectos... o tal vez siempre habían sido insectos y, atraídos por su luz, se habían mimetizado en lectores- girlontape saboreó por primera vez ese fruto agridulce llamado I Wanna Kill All Groupies (a no confundirse con el famoso refrán de su über banda de culto, que dice We're Gonna Kill All The California Girls).

Qué hacer con esta síndrome, tan despiadada como la banalidad agobiante, desoladora de esos lectores hechos cucarachas y/o vice versa? Lo cierto es que no se puede controlar... y cuanto más placer se siente todavía al soltar el flit acompañada de un ángel exterminador! Por ej:

girlGroupie, circa 2010: Nos conocimos en una fiesta, a fines de 2008. Charlamos brevemente, luego te fuiste al baño.

girlontape: O sea que nos conocimos en la cola del baño... y muy caballero me dejaste pasar?

girlGroupie: No, charlamos muy cerca de una chimenea o aparador con adornos. Ahí yo apoyaba la cerveza y un platito con maníes. Vos tomabas vino. Y me acuerdo de tu acento.

girlontape: Cuanto detalle! En cambio yo no recuerdo nada.

girlGroupie: No, claro, imagino que no. Son esas imágenes que se disparan cuando ves una cara que resulta familiar. Sólo eso. Pero como imagen, está buena.

girlontape: Ojito pa'... que terminas en un oxi-retrato!