Entiendo que al contestarte en público estoy cometiendo algo que acá se considera
verboten but hey: ya me cagaron a palos and I'm still standing... al blog como a la guerra, enjoy!
Tu carta me hizo reflexionar, no, flashear con mis vivencias bajo eso que llamas la "oscuridad" reinante en las relaciones sociales porteñas, con lo cual me quedé días deambulando tipo zombie, aturdida por ciertas sórdidas secuencias en mental loop, te mando la más corta:
Quienes NO me han clavado el puñal todavía? A verrrr....
1. Mis mascotas
2. Mi kiosquero fiel
3. Los que no están lo suficientemente cerca
4. NS/NC
De paseo con los perris intento distraerme con ciertas intrincadas y tardías floraciones desplegandose bajo el cielo glorioso del otoño austral, pensando: "Volvé a verla como cuando recién llegaste... cuando no conocías a nadie, no sabías ni una puta palabra de castellano: es hermoso Buenos Aires..."
OK.
Miro la pureza de los arboles, ignaros de la mugre a sus pies. Miro mis bichos coleando, olfateando:
La vida es bella! La basura también! Miro mi nouvelle baticueva: sus baldosas antiguas, sus vidrios de colores, su terraza cargada de jazmín...
Miro mis fotos, que tanta animosidad me han traído y por las que sacrificaría cualquier cosa menos mi integridad, cuya entrega demasiados me han exigido como si fuera chatarra, descartable, canjeable:
el fruto del cerebro humano... el bueno tan lejos del malo... gracias a la viiiidaaaaa....
Y trato de no odiarme.
La corto saliendo a cenar, me cruzo con Major Tommy, el Major me dice "Estás escribiendo muy lindo Stef" y sus palabras, su amabilidad habitual me hacen bien, lo cual debería relajarme pero no, me provoca algo nuevo, opuesto; pienso en tu carta,
y por primera vez me pregunto si el Major sería capaz de clavarme el puñal, o si alguna vez se lo clavó a un amigo; no logro imaginarmelo, pero tampoco hubiese podido imaginar a los que sí me lo clavaron, de ahí mi consternación ante hechos que a ellos les parecen de los más normales, y qué pesadilla esto de escanear todo friendly cual potencial acuchillador, códigos argentos imposibles de descifrar, stop Stef stop.
Doy vuelta la página invitando unas amigas gringas a casa, llegan a tiempo, hago risotto y me sale maso, me equivoco con las cantidades luego me aburro de cocinarlo, cosa rarísima casi me da verguenza enfin, velo piadoso moving on, debatimos mudarnos a Sunnyside Queens no Red Hook no Kreuzberg, nos reímos,
está el novio frenchute de una de ellas y conversamos normalmente según las costumbres de mi galaxia muy muy lejana, es decir: libres de histeria falso pudor machismo reticencia maniobras de poder; pienso en los tiempos en que socializaba seguido con porteños, en lo mucho que confiaba y lo mucho que desconfío, en como he alcanzado ese estado de code red permanente que vos describís en tu carta y que no me pertenece ni ahí, basta Stef basta.
Magia del timing, llega un sobre de cierto amigo en NY, uno que hace años en Dadá reconocí a primera vista cual ese hermanito glamoroso, tierno, herido y extravagante que nunca tuve, difícil resistir a su encanto
(lástima que lo logré: una infidelidad y me ahorraba varios añitos dando vueltas sudacas al pedo pero no, la tana cabeza dura cual heroina de De Sade se mete cada vez más en el horno en nombre de su virtud, y eso que al Marquis lo leí de punta a punta, por qué no le hice caso?)
así que mi hermanito adoré queda mera fantasia incestuosa y salimos, somos castos pero hacemos lío, nos sacamos fotos en lugares impensables y horarios escandalosos, me regala musica, libros, dibujos, me enamoré, no, ya pasó, uyyy ahí volvió, se obsesiona con una chica y estoy celosa pero no se lo muestro, le va mal con la chica y estoy aliviada y tampoco se lo muestro,
al final me aburre un poco, tarde o temprano los pendex siempre me quedan chicos no pun intended, yo orgullosa de mi autocontrol, zafé! Mi hermanito vuelve a su galaxia muy muy lejana; end of story hasta que su sobre ayer me devuelve ese Buenos Aires que todavía encaraba con garra, disfrutaba, me seducía... achtung Stef achtung!
Paso el CD que me mandó mi brother nunca lover, escucho:
Time is like a bullet from behind
I run for cover, just like you.
Time is just a fiction of our minds
I will survive, and so will you.
Y así por fín leo ese telegrama que tardé años en abrir y que dice: Yankee Go Home. Ha sido muy rico todo, no lloraré por ti Argentina y vos tampoco la llores my friend; agarrate esa green card como puedas, y go to the light....