En mi galaxia muy muy lejana tuve cinco no, seis vidas distintas, por eso la metropolis encarnada me parecía inagotable: en una de ellas traduje un tomo de Noam Chomski de 600 páginas, el primero que se publicó en mi galaxia natal, entrevisté a un profesor de filosofia marxista palestino que pasó once años preso en una cárcel israeli,
a un organizador Sinn Fein que estuvo once años preso en una cárcel inglés y luego fue baleado en la panza por un monarquista en Belfast, a un ex Pantera Negra que pasó veinte años en una cárcel estadounidense,
y a quince soldados de un batallón yanki cuyos integrantes volvieron de la primera invasión de Irak enfermos de una extraña, horrible y multifacética peste; esa nota me la compró Le Point pagandomela muchísima plata, fue mi top hit como periodista.
En esa época mi jefe era un corresponsal en Nueva York, un comunista old school que siempre llevaba una bufanda roja impecable y me decía, “Bajá unos cambios pibita que si terminas en cana me toca hacer campaña para sacarte y no tengo ganas!”
“Jajajaj,” le respondía. “Quedese tranquilo que soy militante pero no así de setentosa,” muriendome de orgullo que el gran viejo me retara así, pues yo era jóven y tenía un fuego en las entrañas, a fire in my belly como dicen los yankis,
y me asombra saber que fui esa pendeja fogosa alguna vez, pero me apacigua también pues nada se pierde y nada desaparece, como anoche en el crucero proustiano donde mi amiga Tracy avanzó languidamente hacia mi bajo la sombra de unos árboles en flor,
mientras en otro nivel de la nave los Pareja bailaban en una fiesta de Ale Ros, y cuando Artemis entró llorando en mi habitación la abracé tan aliviada de volver a verla después de una década sin hablar,
luego mientras subía una magnífica escalera de mármol me abrazó apasionadamente alguien que en la vida real es puto, ahí mismo y sin palabras nos acostamos y el sabor de su boca y el olor de su cuello me provocaron un orgasmo arrebatador y me desperté tan emocionada y pensando a la vez: “Qué extraño no extrañar al amor!”
Ahora paso mis días asemblando muebles y preguntandome Cómo pude vivir siete años en un país sin Ikea?? Y salgo a pasear al Barón de Charlus en medio del fulgor un poco fané de ciertas rosas otoñales, cada rosa hablandome en la voz de un ser querido que se fue.
Subscribe to:
Post Comments (Atom)
13 comments:
yo todavia no coleccione vidas pasadas.
but, anytime
no existen paises del primer o tercer mundo.
el mundo se divide en donde hay IKEA y en donde no.
jajajajaj
tampoco existe el 3er mundo... ahora les dicen los paises "emergentes" según mi sister que trabaja en la "cooperación"
el pasado está en el presente QM... i think!
Por ejemplo, el gobernador de Misiones dijo ayer que en 2009 murieron 200 chicos de su provincia por desnutrición (y que hay 6000 en riesgo).
Ojalá nuestro peor problema fuese Ikea.
Divino el relato hasta que me tocaste el temita Ikea, vendí mis muebles y sé que donde iré no podré recuperarlos. Al menos me llevo mis sábanas y organizadores de armario.
Girl! arriving in Paris 06/11, early morning, for 4/5 jours, cómo lo ves?
el mundo se divide en..."los que se dan cuenta" y "los que no", al igual que donde hay o no ikea..
girl, sólo x tu preciosismo, es "traduje" y "abracé".
el final, una estrofa de tango!!
bs
Silvia
Rob: además según el indeK todo pum para arriba mientras la mayoría no alcanza la canasta básica... todo iper merdique, el hecho que viví allí tanto tiempo me asombra por muchos costados believe me
Pix jajajajaj get ready to suffer... mirá en esas fechas no puedo ir pues es el cumple de mi sister y vienen nuestros amigos de Berlin!
uyy Silvia gracias por corregir, supongo que de ahora en más estaré cometiendo muchos más errores mientras el italiano se sobreimpone al castellano...
que bueno que te fuiste
asi hablas mal de otro pueblo
viva argentina carajo!
es cierto hay que ser argentino para amar a tu pais anonimo, argentina pa los argentos carajo
jaja por un momento (un rato largo) pensé que en el comentario anterior te referías a la Argentina como un "país anónimo" y me ofendí un poco mientras que la idea me parecía a su vez genial, es un país anónimo.
y bue, argentina será otra de tus vidas pasadas, tan bizarra como traducir a Chomsky
me encantó tu post, saludos
Post a Comment